Todo se inició hace 21 años, cuando los empleados de la prisión Stock Island Detention Center (Florida EEUU) vieron cómo una familia de patos estuvo a punto de ser atropellada en la carretera que recorre el perímetro del centro. Decidieron ampliar unos metros la valla y construirles un pequeño estanque.
Ellos fueron los primeros residentes de este santuario natural gestionado por personas en ‘cautividad’. Pronto la voz se corrió y a las instalaciones de este centro penitenciario comenzaron a llegar animales abandonados de todo el estado de Florida y, poco después, de todo el país. Por aquel entonces únicamente había 25 animales. Hoy hay más de 150, la mayoría animales exóticos, y puedes entrar en la cárcel a visitarlos.
Realizado por:Inmaculada Ruíz y Laura Segura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario